En el ámbito laboral es posible enfrentarse a cantidad de situaciones cuyo protocolo es desconocido para nosotros y que poco tienen que ver con el ejercicio de nuestras funciones profesionales. Los aspectos relacionados con la administración, la gestión o los contratos son un quebradero de cabeza para cantidad de personas.
En esta ocasión nos centramos en la traducción de los contratos, algo que puede ser imprescindible cuando se realizan relaciones comerciales internaciones o se busca un empleo en el extranjero. Además, esto tiene sus particularidades, pues no se trata de un proceso que se pueda realizar libremente, con un traductor cualquiera. A continuación, explicamos todo lo que debes saber sobre este proceso.
¿Qué es la traducción de contratos?
La traducción de los contratos es un proceso en el que se cambian estos documentos de idioma con exactitud y pertenece a lo que se denomina como traducción jurídica. Requiere de una gran habilidad, pues los contratos cuentan de por sí con ciertas particularidades, como el lenguaje técnico y jurídico. Son aspectos que habrá que trasladar con la máxima precisión posible al idioma al que se desea cambiar.
Cualquier documento de este tipo es el reflejo de un acuerdo jurídico entre ambas partes y tiene validez legal. Por lo tanto, cualquier concepto que se pueda modificar con error o en términos confusos, puede acarrear una gran cantidad de problemas posteriores.
En la mayor parte de los casos, por las características que tienen los contratos, es imprescindible realizar este proceso con la ayuda de un traductor jurado. Se trata de un experto cualificado y certificado para modificar el idioma de documentos que son oficiales.
Los documentos de este tipo que precisan de una traducción con mayor frecuencia son los contratos de compraventa, los acuerdos de distribución, los compromisos de confidencialidad y la intermediación financiera, entre otros.
Características de la traducción de contratos
¿Por qué la traducción de contratos es diferente a la de cualquier otro elemento?, ¿qué características debe tener para que sea viable? A continuación, te mostramos las principales.
Elevado grado de especialización
Es imprescindible que los traductores que realicen este trabajo conozcan muy bien ambos idiomas, incluyendo los términos más técnicos que contiene el documento. A ser posible, lo ideal es que sean profesionales especializados en el ámbito legal o el derecho, familiarizados con este tipo de traducciones.
Garantía de confidencialidad
Durante una traducción de un contrato se debe garantizar la confidencialidad en todo el proceso. Los contratos son acuerdos particulares que deben estar protegidos de cualquier manipulación o difusión, por lo que este trabajo debe hacerse de manera segura.
Precisión minuciosa
Es crucial que la traducción de un contrato sea muy precisa para que no se pierda ningún valor que contenga ni se modifiquen las condiciones del mismo por una cuestión lingüística. Mientras que en otro tipo de traducciones es posible encontrar expresiones equivalentes que no signifiquen con exactitud lo mismo, por una cuestión literaria, en los documentos como estos, que son de tipo legal, la minuciosidad es imprescindible.
Certificación
Un contrato que ha sido traducido debe conservar su validez jurídica y legal, por lo que es imprescindible que cuenta con una acreditación del Gobierno en el sector de traducciones jurídico-administrativas.
¿Quién puede traducir un contrato?
Los contratos deben cambiar su idioma en las manos de un traductor jurado, pues no es válido que se haga mediante un profesional cualquiera que domine ambas lenguas. Se trata de un experto nombrado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación que tiene la potestad de realizar traducciones de documentos oficiales y está en disposición de certificarlos.
Este profesional tiene la cualidad de firmar y sellar cualquier documento para aportar con ello la validez legal pertinente. De hecho, esto lo puede hacer no solo con contratos, también con testamentos, poderes notariales o certificados de matrimonio.
Dada su formación y su carácter como traductor oficial, este profesional garantiza una buena calidad a la hora de cambiar de idioma este documento, exactitud en este proceso y validez legal en el resultado. Solo los profesionales que acrediten conocimientos académicos en este ámbito y superen las pruebas impuestas por los organismos oficiales podrán ser habilitados como tal.
¿Cómo conseguir una traducción jurada de un contrato?
Dado que solo estos expertos van a ofrecerte la traducción del contrato que necesitas y únicamente de su mano esta puede tener validez, seguro que te estarás preguntando cómo acceder a ellos. En la actualidad, por suerte, hay empresas especializadas como Geajuridicas que ponen a tu disposición los servicios de un equipo de traductores oficiales certificados y muy experimentados en este proceso.
Lo que hacen es proporcionar un servicio de traducción eficiente a una gran cantidad de idiomas, de la mano de los traductores jurados, que además son expertos en este tipo de documentos, con amplio conocimiento en derecho y en administración.
Cuando necesites traducir un contrato o cualquier otro documento que sea de carácter oficial, solo tendrás que contactar con ellos para indicar el tipo de documento que es, la extensión y el idioma al que deseas cambiarlo. Con esto podrán ofrecerte un plazo y un presupuesto muy exacto en tiempo récord, para que puedas ponerlo en marcha cuanto antes.
Recuerda que solo las entidades que están avaladas por el Gobierno de España y el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas tienen la potestad de ofrecerte este servicio con las garantías que necesitas. De lo contrario, puedes tener problemas con la validez de tus documentos.